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Zapato rojo de tacón alto
Lata de cerveza apachurrada
Colillas de cigarro
Corbata
Hojas de periódico revoloteando inmóviles
Charco
Coladera
Torreta de patrulla
Pistola
Sangre en el pavimento
Pedacitos de vidrio
Alianza
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Suave sonrisa que invita al placer nocturno,
A descubrir lo que se oculta debajo de ella,
Tras los pliegues de tela. Mi cuerpo taciturno
Te busca entre el deseo, esperando la faena
Que entre las sábanas se lleva a cabo.
Curvatura de tu cuerpo, paisaje erótico
De vaivenes y cadencias, que yo grabo
En mi cuerpo caliente. Templo gótico
Donde se efectúa el ritual de la piel,
La penetración, sin tregua ni cuartel,
En que los cuerpos se funden en uno,
En que tus labios se vuelven el mundo,
En que bebemos nuestros besos de aguamiel,
En que mi espada conquistadora enfundo.
***
Geometría de esferas tu piel,
Laberinto del cual ser Minotauro y Teseo
Entregados al mismo deseo
Al hilo de una Ariadna fiel
Paisaje de placeres ocultos
La carne que a mi carne atrae
A tu abrazo mi cuerpo cae
Y mi sexo en tu interior sepulto
Bebiendo de tu caja de Pandora
Me veo, durmiendo en tu pecho suave
Después de penetrar la noche grave
Entregado mi sexo que te adora
Ignoro qué depara el fin de la noche
Qué luz traerá el nuevo día
Dolor que desenamoraría
Incluso al mínimo reproche
Lo que sé con toda certidumbre
Es lo inextinguible de este deseo
Estas ganas de ti que parafraseo
En el lenguaje eterno de tu lumbre
Tu cuerpo será el lienzo de mi poesía
Narraré la historia de tus gemidos
De placer, de gozo, no reprimidos
Cuando con fuerza viril te embestía
Estas rimas a mí déjamelas
Tu abre la boca y recibe mi sexo
Dejemos los sinsabores inconexos
Tus piernas y caderas, dámelas
Aquel cuerpo
Hay tristeza en la mirada de aquel cuerpo
Como el tiempo que fallece inexorable
En las noches del verano petulante
Donde el goce del amor hoy yace muerto
Hay penumbra en la mirada de esa sombra
Que se llama como tú, y que en la tarde
Cuando el viento ajeno muerde y la piel arde
Y la inmóvil soledad ya no te asombra
De tu boca sólo quedan dos suspiros
Dos respiros de tus besos, bella loca
Que me obligan a buscar nuevos caminos
Que me obligan a encontrar nuevos senderos
Y mi cuerpo duerme en su cama de roca
Esperando un día encontrarte en sus terrenos
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